¡Bienvenidos, seguidores de Hanami Dango! ¿Acostumbráis a leer novelas? Pues hoy venimos a proponeros la lectura de La general y la princesa, un baihe que aterrizó en España el pasado doce de mayo de la mano de Monogatari Novels y que siempre habíamos soñado con ver publicado en nuestro país. ¡Quedaos a leer nuestra reseña de la obra!
Título: La general y la princesa.
Autora: Qing Jun Mo Xiao.
Editorial: Monogatari Novels.
Traducción: Alicia Sabio Anguiano.
Género: baihe, fantasía, histórico.
Volúmenes: 4 y cerrada.
Páginas: 450, con ilustraciones a color.
Precio: 22 €.
Como muchos sabréis, la palabra baihe se utiliza para denominar obras chinas que retratan el amor entre dos mujeres, siendo este el caso de La general y la princesa, de la autora Qing Jun Mo Xiao, muy conocida también por su obra Clear and Muddy Loss of Love.
La general y la princesa se sitúa en una China imperial ficticia en la que la Nación de Li debe lidiar con diversos conflictos. En el norte, las tribus de las estepas, conocidas como los xiongnu, saquean los pueblos, mientras que los enemigos del sur esperan el momento en el que las defensas de la nación se debiliten. Por si fuera poco, la corte imperial se sume en una red de conspiraciones y traiciones tras la muerte de la emperatriz.
En mitad de todo este caos encontramos a nuestras protagonistas. Lin Wanyue tenía catorce años cuando se adentró en las montañas a buscar hierbas medicinales y, al volver, encontró su aldea masacrada por los xiongnu. Enterró a sus padres y a su hermano, quemando el resto de los cadáveres, ciento dieciocho en total.
Adoptando la identidad de su hermano fallecido, Lin Feixing, caminó y caminó hasta llegar al cuartel del general Li Mu y suplicó alistarse en el ejército, convirtiéndose finalmente en soldado. Dos años después, Lin Wanyue se ha convertido en toda una veterana, pues la tasa de mortalidad de los soldados rasos suele ser bastante alta. Sin embargo, ella no quiere ascender en el ejército. Piensa que, cuando mate a tantos xiongnu como vidas de su aldea fueron arrebatadas, podrá completar su venganza y morir en paz en el campo de batalla.
Lejos de allí, en el palacio de la capital, vive Li Xian, hija de la emperatriz Li Qingcheng. Li Xian tiene un hermano pequeño llamado Li Zhu, que es el príncipe imperial y próximo heredero al trono. Tras la muerte de la emperatriz despuést de una larga enfermedad, la princesa es la única que puede salvar a su hermano de una muerte segura, pues las conspiraciones palaciegas para acabar con su vida ya están en marcha.
En un intento para captar la ayuda de su tío, el general Li Mu, Li Xian consigue formar parte de una comitiva que viaja al campamento militar del norte, donde conoce a Lin Wanyue.
La general y la princesa
Cuando Li Xian conoce a Lin Wanyue le parece poca cosa. Es un soldado bastante bajo y que no aparenta ser muy fuerte, aunque en este momento ya ha alcanzado el rango de general por su destreza con el arco de dos piedras. Su opinión cambia cuando le ve disparar, y queda todavía más impresionada cuando Lin Wnayue se adentra sin miedo en el campo de batalla.
Li Xian, a quien las intrigas de palacio han convertido en una joven calculadora y manipuladora, ve en el joven general una montaña de arcilla que moldear a su antojo: si escala posiciones en el ejército mientras consigue su confianza, podrá ponerlo de parte de su hermano y conseguir aliados en su lucha particular por el poder.
El problema con el que se topa la princesa es que Lin Wanyue no tiene ambiciones ni aspira a nada más que sobrevivir cada día hasta cumplir su misión, por lo que no le es posible comprar su lealtad. Necesita colocar una fila de migas de pastelitos que hagan que el propio general llegue por sí mismo a la conclusión que Li Xian desea.
De este modo, Li Xian se convierte en una figura central en la vida de Lin Wanyue. Al principio la general se siente cómoda con ella porque hace mucho tiempo que no ha estado en compañía de otra mujer, a pesar de que no puede revelarle su identidad, pero poco a poco también comienza a crecer su admiración por ella y sus agudas deducciones, hasta que llega el momento en el que Li Xian le ofrece algo en lo que no había pensado: un motivo para vivir más allá de su venganza personal.
Una relación complicada
Al empezar a leer la novela, uno podría pensar que la complicación de los sentimientos de ambas va a venir dada por la diferencia en su rango social y por la identidad secreta de Lin Wanyue, pero cuando conocemos a la princesa entendemos que estamos entrando en terrenos todavía más pantanosos.
Lo que Lin Wanyue piensa que es amabilidad y generosidad por parte de Li Xian, no es más que un plan calculado en beneficio del hermano de esta última. ¿Qué ocurrirá cuando la general que la admira, respeta y sigue como si fuera un cachorrillo, descubra la verdad? ¿Y hasta qué extremos llegará Li Xian para proteger a su hermano?
La rueca de mentiras va a seguir girando, tejiendo y atrapando a Lin Wanyue en una lucha que poco a poco van a ir convirtiendo en suya.
Lo bueno y lo malo de la edición de Monogatari Novels
La general y la princesa ha sido publicada en tapa dura, con una preciosa ilustración de portada de Piojooojo e ilustraciones interiores y postales de Piojooojo, Laura Madrid Torres y Sara Aguilar Perea. Los motivos de las solapas, los dibujos al inicio de cada capítulo representando a las protagonistas y el cuidado prólogo que nos ayuda a entender el contexto de la obra, nos hacen darnos cuenta de que se ha pensado con mimo hasta el último detalle de esta edición.
Sin embargo, y precisamente por este motivo, llama la atención la cantidad de erratas que se han colado en las páginas de la novela. Letras duplicadas, mayúsculas donde no tocan, párrafos unidos donde no deberían, alguna que otra confusión de nombres… Estos errores se pueden encontrar a lo largo de toda la obra, resultando bastante molestos para la lectura.
Si comparamos quiénes han intervenido en La general y la princesa con las personas involucradas en Cómo sobrevivir siendo un villano, novela que salió al mismo tiempo, podremos ver que esta última cuenta con una editora, mientras que La general y la princesa no. La diferencia entre ambas pone de manifiesto lo necesaria que es esta figura para la revisión de cualquier obra, y sabemos que Monogatari ya ha tomado nota de ello, por lo que esperamos que en el segundo volumen no nos vuelvan a dar este disgusto y que se pueda llegar a hacer una edición revisada del primero.
Hasta aquí nuestra reseña del primer volumen de La general y la princesa, ¿habéis tenido ya la oportunidad de leer la obra? No dudéis en dejarnos vuestras opiniones en comentarios y en nuestras redes sociales, ¡hasta la próxima!
