¡Bienvenidos, lectores y lectoras de Hanami Dango! Hoy os traemos una reseña del nuevo manga de Arechi Manga, Buscadores de Cadáveres, de Housui Yamazaki, un manga policiaco-detectivesco que viene cargado de intriga, emoción y terror.
Título: Buscadores de cadáveres
Autora: Housui Yamazaki.
Traducción: Verònica Calafell.
Editorial: Arechi Manga.
Género: acción, terror, suspense.
Páginas: 184 páginas B/N.
Número de tomos: 4.
Precio: 9,95€.
Argumento
La historia que se cuenta en Buscadores de cadáveres es simple: unos amigos, durante las vacaciones de verano deciden buscar a su amiga desaparecida dos años atrás, Ayano Hirakawa. Podríamos finalizar esta reseña extremadamente pronto, pero realmente, os estaríamos engañando, esta historia promete mucha más complejidad de la que aparenta.
Empecemos por el principio, como ya hemos dicho, este grupo de amigos, formado por Isshin, el protagonista y sus amigos, Haruto, Sōta y Sakurada (última integrante de la Liga de Detectives que se une en el último momento antes de iniciar la aventura), suben a sus bicicletas y se dirigen a buscar a su amiga desaparecida.
Antes de salir en busca de Ayano, la cual creen que sigue con vida, Haruto desactiva el GPS de los teléfonos móviles para que no puedan ubicarlos durante su aventura. Sin embargo, su juventud y sus ansias de popularidad le hacen querer documentar sus peripecias en una red social similar a Twitter, donde alguien empieza a seguirles la pista…
La única indicación del posible paradero de Ayano que tienen es gracias a Isshin, que descubrió que en la foto que enviaron a todos los dispositivos móviles cuando Ayano desapareció había un hombre con una máscara tengu y al fondo de la misma se veía una torre de cableado eléctrico que no correspondía con la zona en la que ellos viven.
Más tarde, el protagonista nos habla que su pasión por las torres de cableado eléctrico solo la comprendía Ayano, y es por esta razón que quiere encontrarla y traerla de vuelta con sus amigos. Entonces, cuando ya han encontrado el camino de torres de cableado iguales a la de la foto, se dan cuenta de que un coche los está siguiendo.
Se produce entonces una escena de persecución entre la Liga de Detectives, que se desplazan en bicicleta, y el coche, hasta que llegan a una especie de ladera donde del coche se baja una mujer y se presenta al grupo protagonista. Ella es Narumi Torakado, periodista freelance, que estaba siguiendo sus aventuras desde la red social.
A partir de este divertido encuentro, la periodista los acompañará, o más bien, los adolescentes se aprovecharán de que Narumi tiene coche y la utilizarán para acelerar su viaje hacia el monte Tsukuo que apuntaba a ser eterno en bicicleta.
Narumi le comenta que el caso que investigan, la desaparición y posible muerte de Ayano, les interesa porque está investigando el caso de desaparición de cuatro chicas hace diez años a manos del tengu secuestrador de menores y la desaparición de un compañero de profesión que investigaba el mismo caso que ella hace dos.
Entonces, comentan que este hombre regentaba un camping y que ya lo encarcelaron años atrás, por lo que Narumi sopesa la idea de que la policía encarcelara a un inocente porque no encontró al culpable. En ese momento, llegan a la cabaña del camping que gestionaba el tengu secuestrador de menores y se deciden a entrar y explorar, encontrando una habitación de los más siniestra…
Y hasta aquí lo que podemos contar de la historia a grandes rasgos, ahora pasamos a comentar cómo se configura la historia, es decir, la trama y las referencias que existen en esta obra.
Trama
Empecemos por el subtítulo, creemos que el grupo de protagonistas se llamen así mismos «Liga de Detectives» es una clara referencia a Detective Conan y su grupo de amigos, que se denominan «Liga juvenil de detectives». Creemos, además, que el autor, Housui Yamazaki, lo hace desde el cariño, el respeto y la admiración hacia la obra de Gōshō Aoyama.
De hecho, incluso los personajes se parecen, guardan ciertas similitudes entre los componentes de la «Liga juvenil de detectives», e incluso esto es una decisión tomada con sabiduría por parte del autor, porque nos ayuda a delimitar fácilmente a los personajes, incluso sin tener que aprendernos los nombres.
Como decíamos al principio, esta obra se va complicando según avanza la historia: al principio, parece una aventurilla entre amiguitos que buscan a su amiga desaparecida (una misión que claramente les viene grande) pero se va complicando según pasan las páginas: la distancia que tienen que recorrer, lo vigilados que están desde el principio, las fotos a Sakurada o la aparente corrupción de la policía.
Decía el magnífico Gabriel García Márquez que el género policíaco nació acabado, porque ya en Edipo Rey está su propia muerte, donde el detective es el propio culpable (frente a este tipo de afirmaciones, uno solo puede quedarse asombrado y repetirlas para que más gente las conozca), pero que eso no nos haga disfrutar del misterio y lo siniestro de esta historia, que es, cuanto menos, intrigante.
De momento no nos imaginamos quién es el secuestrador o asesino de Ayano, lo que sí sabemos con seguridad es que esta obra intenta dar un nuevo soplo de aire fresco al manga detectivesco o policiaco, añadiendo además una magnífica atmósfera de terror que mantiene al lector en vilo constantemente.
Todo esto acompañado de una leve comedia, pero efectiva, que ayuda a aliviar la tensión que provoca el manga, que no busca en ningún momento la carcajada sino más bien una leve sonrisa que allane el camino hacia la próxima escena de acción o terror que el autor nos tiene preparada. De esta forma, podemos decir que se equilibran de forma perfecta los momentos de tensión con los más tranquilos y sosegados.
Como conclusión, por si no ha quedado suficientemente claro durante toda la reseña, esta obra nos ha encantado, la recomendamos y continuaremos su lectura. ¿Qué te ha parecido a ti? ¿Te gustan los mangas de detectives? Os leemos en comentarios y por Twitter. Podéis seguirnos en Twitter, Instagram, Twitch o en nuestro canal de Discord. ¡Hasta la próxima!
